Agricultura Regenerativa: Sanar la tierra para un futuro sostenible

Un enfoque agrícola que no solo sostiene, sino que regenera. Conoce sus orígenes, fundamentos, pioneros y aplicaciones en el mundo.
La agricultura regenerativa es un sistema de prácticas agrícolas que busca restaurar y mejorar la salud del suelo, los ecosistemas y las comunidades. A diferencia de la agricultura convencional, que a menudo explota los recursos naturales, este enfoque prioriza la regeneración, promoviendo la biodiversidad, la captura de carbono y la resiliencia climática. Su objetivo es devolver a la tierra más de lo que se toma, creando sistemas agrícolas sostenibles y productivos a largo plazo.
El concepto de agricultura regenerativa tiene sus raíces en prácticas ancestrales de pueblos indígenas, como los sistemas agroforestales de Mesoamérica y las técnicas de cultivo en armonía con la naturaleza. Estas prácticas, basadas en el conocimiento tradicional, demostraron que es posible cultivar de manera sostenible sin degradar los recursos naturales. Sin embargo, como movimiento moderno, la agricultura regenerativa comenzó a tomar forma en las décadas de 1980 y 1990, impulsada por la necesidad de abordar problemas como la degradación del suelo, la pérdida de biodiversidad y el cambio climático.
Uno de los pioneros clave de este movimiento fue Robert Rodale, hijo de J.I. Rodale, fundador del Instituto Rodale en Estados Unidos. Robert popularizó el término "agricultura regenerativa" en los años 80, describiéndolo como una evolución de la agricultura orgánica. Bajo su liderazgo, el Instituto Rodale se convirtió en un centro de investigación y promoción de prácticas que no solo evitan daños al medio ambiente, sino que activamente lo regeneran. Rodale enfatizó la importancia de la salud del suelo como base para la sostenibilidad agrícola y la seguridad alimentaria.
En Brasil, Ernst Götsch, un agricultor e investigador suizo, desarrolló la agricultura sintrópica, un sistema que imita los procesos naturales de los ecosistemas forestales para regenerar tierras degradadas. Götsch demostró que es posible combinar la producción de alimentos con la restauración ecológica, utilizando técnicas como la sucesión de especies, la poda estratégica y la integración de árboles, cultivos y animales. Sus métodos han sido adoptados por agricultores en todo el mundo, mostrando que la agricultura puede ser una fuerza regenerativa para el planeta.
Por su parte, Allan Savory, un ecólogo y ganadero de Zimbawe, revolucionó el manejo de tierras áridas con su enfoque de manejo holístico. Savory descubrió que el pastoreo planificado de animales, imitando los patrones naturales de los herbívoros, puede revertir la desertificación y restaurar la fertilidad del suelo. Su trabajo ha sido especialmente impactante en África, donde tierras consideradas irrecuperables han sido transformadas en pastizales productivos y biodiversos. El manejo holístico ha sido adoptado en diversas regiones del mundo, demostrando que la ganadería, cuando se practica de manera regenerativa, puede ser parte de la solución ambiental.
Los principios fundamentales de la agricultura regenerativa incluyen la mejora de la salud del suelo mediante el aumento de la materia orgánica, la reducción de la labranza y el uso de compost y cultivos de cobertura. También fomenta la biodiversidad a través de la rotación de cultivos, la integración de animales y la creación de hábitats para polinizadores. Además, busca capturar carbono en el suelo para mitigar el cambio climático, mejorar el ciclo del agua aumentando la infiltración y retención de agua, y fortalecer la resiliencia climática creando sistemas agrícolas resistentes a sequías, inundaciones y otros fenómenos extremos.
La agricultura regenerativa se ha implementado con éxito en diversas regiones del mundo. En América del Norte, el Instituto Rodale y proyectos como White Oak Pastures en Georgia han demostrado cómo regenerar suelos degradados. En América Latina, Brasil lidera con la agricultura sintrópica, mientras que en Argentina se promueve la siembra directa y los cultivos de cobertura. En África, países como Kenia y Zimbawe han adoptado el manejo holístico de Allan Savory para revertir la desertificación. En Europa, organizaciones como Regenerative Agriculture UK en el Reino Unido y AlVelAl en España trabajan con agricultores para regenerar tierras. En Oceanía, Australia ha impulsado el pastoreo regenerativo, especialmente en Nueva Gales del Sur.
El futuro de la agricultura regenerativa es prometedor. Organizaciones como la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) y el IPCC (Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático) reconocen su potencial para enfrentar la crisis climática y alimentaria. Aunque su adopción a gran escala enfrenta desafíos, como la falta de políticas de apoyo y la necesidad de más investigación, su impacto ya es innegable.
La agricultura regenerativa no es solo una alternativa: es una revolución necesaria para sanar la tierra y asegurar un futuro sostenible.
Durante marzo en GreenNetwork.cl, aprende y comparte sobre cómo la Agricultura Regenerativa impacta en nuestro planeta.
¡Regeneremos mientras cultivamos!