Recientemente Mónica Musalem recibió el Premio Veitch Memorial Medal convirtiéndose en la primera mujer latinoamericana en ser galardonada por la Royal Horticultural Society (RHS) en Inglaterra. Un reconocimiento que se entrega desde 1870 a nivel mundial a personas que contribuyan con su trabajo al avance de la ciencia y la práctica de la horticultura.
La Agrónoma egresada de la Universidad Católica, ha dedicado gran parte de su vida a fomentar el uso de especies chilenas en áreas verdes, tanto en sitios públicos como privados, siempre buscando la integración de la biodiversidad nativa en proyectos de restauración ecológica.
Estas especies han demostrado una resiliencia extraordinaria al cambio climático y a fenómenos como la sequía, y el aumento de las temperaturas. Dirige, desde hace casi tres décadas, el Vivero Pumahuida, y en el año 2008 fue parte del grupo que fundó el Congreso Nacional de Flora Nativa, el cual ya prepara su octava versión. Sin duda, una historia extraordinaria y que en Greenetwork quisimos conocer.
¿Cómo surgió su interés por la flora nativa?
Siempre me fascinó la naturaleza, el contacto con ella siempre fue una experiencia que me hacía sentir plena. En el año 1996 entré a estudiar un Postítulo en Arquitectura del Paisaje en la Universidad de Chile. Fue después de tener las primeras clases de distintos temas relacionados con el paisajismo, que me surgió la idea de formar un vivero especializado en especies nativas de Chile con el sueño de que las áreas verdes públicas y privadas de nuestras ciudades, fueran creadas con las especies nativas propias de cada región y tuvieran una identidad y carácter propio vinculado con su paisaje natural. Entonces, pensé que había que cultivar nuestras especies como si fueran plantas de uso ornamental y en formatos aptos para proyectos de Paisajismo. Con ese sueño fue que nació la idea y fundé el Vivero Pumahuida ese mismo año 1996.
¿Qué significa para ud ser la primera chilena en recibir este importante reconocimiento?
Ser la primera chilena y latinoamericana que recibe el premio Veitch Memorial Medal, otorgado por una institución tan prestigiosa como la Royal Horticultural Society (RHS) es un increíble honor que me emociona profundamente y del que estaré eternamente agradecida.
Es un reconocimiento que recibo en representación de todos los que me han acompañado en este camino, de los que me han inspirado y apoyado, de los que han sido y son parte del Vivero Pumahuida y de tantos que hacen tanto por investigar, enseñar, dar a conocer y cuidar nuestra flora chilena.
También, es una motivación y nueva inspiración para seguir trabajando y aportando en todo lo que pueda para contribuir a cuidar y conservar nuestra flora y sus ecosistemas tan amenazados por la crisis climática y por nuestras acciones.
Para mí fue muy emocionante estar en la ceremonia de entrega de los premios de la RHS y darme cuenta como nuestra flora nativa estaba en primera línea en medio de grandes horticultores del mundo entero y era reconocida y valorada por todos los asistentes de una manera que realmente me conmovió. Esta vivencia me impactó mucho, y me hizo reafirmar mi certeza del maravilloso tesoro natural que poseemos, que es patrimonio de todos, y que dan ganas inmensas de cuidarlo y conservarlo por nosotros y por las futuras generaciones.
Pensando en el cambio climático ¿Qué ventajas representa la flora nativa para enfrentar el cambio climático?
Lo más importante, es que frente a la crisis climática que estamos viviendo actualmente, tenemos la responsabilidad de no solo cuidar nuestra flora, sino que más importante aún, que es cuidar sus ecosistemas naturales y todas las otras formas de biodiversidad que conviven en ellos.
Sin una naturaleza sana no tenemos futuro porque somos naturaleza. Por eso, el cuidar nuestra flora y sus ecosistemas es un acto de autocuidado por nosotros y por los que vienen detrás de nosotros.
Tenemos que tomar conciencia de esto y accionar, cada uno desde su ámbito y posibilidades, en post del cuidado de nuestro patrimonio natural, para que cada una de nuestras intervenciones al paisaje sea realizada con un respeto profundo y consciente de las consecuencias de nuestras decisiones.
Y en ese sentido, hay mucha gente que silenciosamente está desarrollando iniciativas que son maravillosas y se agradecen de corazón.
Por otra parte, nuestra flora es una gran aliada que tenemos frente a la crisis climática que estamos viviendo. Si trabajamos con las especies ambientalmente adecuadas para el lugar y para el propósito de lo que buscamos, vamos a poder transformar áreas verdes en ecosistemas funcionales con todos los beneficios ambientales, sociales, estéticos y culturales que ellas nos pueden regalar
¿Con qué especies está trabajando actualmente en el vivero Pumahuida?
Actualmente, en el Vivero Pumahuida estamos cultivando más de 230 especies nativas de Chile, aptas para proyectos de paisajismo y de restauración ecológica en zonas áridas y semiáridas de Chile. Son especies de alto valor ornamental y ecológico por su funcionalidad y por las relaciones que tienen con otras formas de biodiversidad como avifauna, insectos y polinizadores, con quienes han coevolucionado en nuestro territorio.
La mayoría de estas especies son endémicas de nuestro país, lo que quiere decir que solo existen de manera natural en Chile y en ninguna otra parte del mundo por lo que si desaparecen de aquí, desaparecen del planeta. Darnos cuenta de todas estas relaciones virtuosas nos genera un sentido de pertenencia a nuestro territorio. Y porque solo existen en Chile, somos los únicos que podemos cuidarlas y proteger sus hábitats naturales para que puedan seguir existiendo. Para mi cultivar nuestras especies es una forma en que cada uno puede contribuir a su conservación y puesta en valor.
¿Cómo aporta a la sostenibilidad el trabajo con la flora nativa?
De muchas maneras. Al cultivar especies nativas o trabajar con ella desde distintos ámbitos, se va generando un vínculo y te vas maravillando de sus estrategias evolutivas de sobrevivencia, de su funcionalidad y valor ecológico, de sus aromas, sus colores y texturas, y te agarra y ya no la sueltas más. Luego, surge el deseo de seguir aprendiendo y conociendo más sobre ella y de conocer sus lugares de origen, y es allí cuando ocurre lo más importante, que es que te surge el deseo de cuidarla y contribuir a su conservación, y para eso hay que cuidar los lugares donde ellas crecen; sus hábitats y ecosistemas.
Y desde ese momento mágico todas nuestras intervenciones al territorio se harán con otra conciencia y con respeto, porque conocemos y valoramos lo que tenemos, y esa actitud de respeto, de valoración, de sentirse parte de esa naturaleza, nos genera un sentido de pertenencia que es una fuerza clave que sí tiene un efecto significativo en la sostenibilidad, porque cuando algo nos pertenece o le pertenecemos desearemos cuidarlo con todas nuestras fuerzas y posibilidades.
¿Qué proyectos vienen para este año?
Vienen muchos proyectos hermosos este año y para adelante, los que irán saliendo a la luz, de a poquito porque todo necesita su tiempo para madurar.
Por lo pronto este año 2024, del 14 al 16 de noviembre, se realizará la Octava versión del Congreso de Flora Nativa de Chile, en la Universidad Austral en Valdivia.
Es un evento muy importante y único porque es una instancia de encuentro con todos los que realizamos alguna actividad con nuestra flora nativa desde científicos y académicos, profesionales del paisaje, empresarios, viveristas, coleccionistas, aficionados que quieren aprender sobre nuestra flora. Nos une un gran amor por ella y nuestra naturaleza. Durante el congreso se generan vínculos y se comparten conocimientos y experiencias que nos enriquecen a todos y conversamos los temas que nos inspiran o que nos inquietan sobre nuestro futuro, en relación con nuestro patrimonio natural.
Por otra parte, este año formamos la Fundación Flora Nativa Chilena junto a Flavia Schiappacasse y Eduardo Olate, y a través de ella, esperamos seguir contribuyendo a difundir y promover el conocimiento, el cultivo y el uso sostenible de nuestra flora como una forma de contribuir a su conservación y la de sus ecosistemas.