Como parte de las actividades de promoción de su programa de bioestimulación integrada, Celerus®, la empresa impartió un webinar sobre la importancia de la actividad biológica en el suelo y cómo medirla, donde se resaltó la importancia de la agricultura regenerativa.
Uno de los principales desafíos de la producción agrícola del futuro es el aumento sostenido de la población, lo que significa que los agricultores alrededor del mundo deberán producir más alimentos optimizando los recursos en un escenario de cambio climático que cada vez se agudiza más.
Varios esfuerzos a nivel mundial adheridos a medidas como los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, buscan dar solución a este problema, abordándolo desde distintos frentes. Uno de ellos es la agricultura regenerativa, un conjunto de estrategias basadas en la ciencia y décadas de aplicación de buenas prácticas, que reúne técnicas de la agricultura orgánica y convencional.
Así lo explicó la Dra. María Mercedes Martínez, especialista en microbiología y PhD en Ciencias Agrarias de la Universidad de Bonn, Alemania, quien dictó el webinar: ‘La importancia de la actividad biológica en el suelo y cómo medirla’, organizado por Syngenta en el marco de la promoción de su programa Celerus®. “Es una aproximación holística con la idea de reducir la producción de gases de efecto invernadero (GEI), adaptativa a cada contexto. Es una inversión para generar ingresos a mediano y largo plazo”. La agricultura regenerativa es uno de los pilares de sustentabilidad de Syngenta y la base de Celerus®, que comprende un programa de bioestimulación que se adapta a las necesidades de los productores.
Un Suelo Vivo y diverso en microorganismos benéficos
Durante el seminario online, se abordó la estrategia de bioestimulación integrada de Celerus®, enfocándose específicamente en dos de las soluciones que comprende el programa. El primero es VIVA, un conjunto de sustancias orgánicas que mejora las condiciones físicas, químicas y biológicas del suelo, pero sobre todo la biológica, contiene componentes de bajo peso molecular que son específicos para aumentar la población microbiológica, generando una mayor diversidad de comunidades de microorganismos benéficos.
Yegun Nativa, por otro lado, es un bioestimulante formulado a partir de hongos formadores de micorrizas, y se trata del producto con mayor cantidad de propágulos por gramo, que además contiene cinco especies, provenientes de cuatro géneros, distinguiéndose de otros productos del mercado a base de micorrizas.
La Dra. Martínez también se refirió a la importancia de la diversidad y abundancia de los microorganismos benéficos, además de los aportes de los bioestimulantes como complemento y promotores de la relación suelo-planta-agua-microrganismos… Todo ello base de Celerus®️.
Como el nombre del seminario lo indica, la experta explicó cómo medir la salud de los suelos para saber si están sanos, lo que se puede realizar mediante distintos análisis como la medición del carbono de biomasa microbiana, el carbono orgánico total, la cantidad de lombrices, las enzimas activas en el suelo o la respiración del suelo.
Conservación de un recurso vital para la producción agrícola
Finalmente, la especialista abordó las etapas y principios de la agricultura regenerativa; entender el contexto de la operación, minimizar la alteración del suelo, maximizar la diversidad de cultivos, mantener el suelo protegido, mantener las raíces activas, e integrar la producción animal. Estas prácticas, en conjunto, facilitan la restauración de la fertilidad del suelo y optimizan el uso y conservación del agua, un recurso esencial pero cada vez más escaso en la producción agrícola. En cuanto a los hongos formadores de micorrizas, se destacó su importancia en la transferencia de agua y nutrientes a través de la rizosfera. Estos inoculantes, junto con prácticas como las cubiertas vegetales, abonos verdes e integración de la producción animal, promueven y mejoran la salud, calidad del suelo y la eficiencia en el uso de agua
La incorporación de hongos formadores de micorrizas, que permiten a los cultivos aumentar la captación de agua gracias a la transferencia de este elemento a través de la rizosfera; la utilización de cubiertas vegetales, que favorecen la salud del suelo y la capacidad de retención de agua; o la integración de la producción animal para minimizar la alteración del suelo, son solo algunas de las medidas con que la agricultura regenerativa promueve la conservación del agua mediante la buena salud de los suelos.
A modo de conclusión, la experta en microbiología señaló que el compost, la economía circular de residuos, los inoculantes microbianos, la rotación de cultivos, la agricultura de precisión, la fertilización ajustada y el manejo integrado de plagas y enfermedades, en su conjunto componen la base de la agricultura regenerativa y buscan que el productor tenga mayores retornos a mediano y largo plazo.
Nota Syngenta por BiologicalsLatam