Estamos en un mundo donde la responsabilidad de las empresas y su impacto en el medioambiente, la economía y los aspectos sociales cobran cada vez más importancia.
La responsabilidad de las empresas se ha convertido con el tiempo en un concepto que no solo entrega valor a las organizaciones, sino que puede convertir a un negocio en un agente de cambio multidimensional, algo que es cada vez más valorado por los inversores y los consumidores que hoy buscan marcas más comprometidas.
Sistema B, es una organización sin fines de lucro, que invita a actores relevantes como las empresas, para construir una nueva economía donde el éxito y los beneficios financieros trabajen por construir una economía más justa, equitativa y regenerativa para las personas y el planeta.
Un desafío que hoy es prioridad para empresas de diferentes tamaños, muchas de ellas tradicionales y reconocidas a nivel mundial tal como la Viña Concha y Toro, la cual expuso a través de Priscila Fernández, coordinadora de Sustentabilidad, en el seminario “Empresas B: sostenibilidad e impacto más allá de la rentabilidad”, que organizaron el Campus Santiago, a través de la unidad de Extensión, junto a la Escuela de Ingeniería Comercial de la Universidad de Valparaíso.
Empresa con sello B y el compromiso de ser una mejor empresa
Desde Viña Concha y Toro señalaron que la certificación como empresa B los ha llevado a que: “Nuestros colaboradores están comprometidos en generar impactos positivos en su trabajo diariamente, en cada una de sus acciones. Hemos llegado a cada uno de nuestros fundos, bodegas de vinificación, plantas de envasado y oficinas corporativas con el mensaje sobre lo que significa ser empresa B y cómo podemos generar impactos positivos en nuestro día a día. Con esta certificación tenemos el compromiso de ser cada día una mejor empresa, que crea impacto positivo en todos nuestros grupos de interés y que se incorpore en toda nuestra cadena de valor”.
La Viña Concha y Toro forma parte de la comunidad global de Empresas B desde abril de 2021, debido a que “desde antes de ser una Empresa B, buscábamos un estándar de sostenibilidad para certificar de manera transparente e independiente nuestro compromiso con los distintos grupos de interés y los valores en los que creíamos. B Corp es un estándar internacional que se centra no solo en las preocupaciones ambientales, sino también en lo social, los trabajadores, los clientes y la gobernanza”, explicaron.
La sustentabilidad en el centro
Hoy la empresa tiene a la sustentabilidad como el centro de su estrategia y aspira a convertirse en un referente mundial al respecto, meta que sumó a otras marcas del holding como Conosur, Trivento en Argentina y Kross (cerveza). “Esperamos mantener y mejorar nuestro puntaje en la recertificación de 2024. Para esto hemos trabajado junto a un grupo líder de diferentes áreas de la compañía que representan las cinco Áreas de Impacto de la Certificación: Gobernanza, Comunidad, Clientes, Trabajadores y Medioambiente. Hemos identificado nuestras principales brechas y preparado planes de trabajo”.
En Chile cerca de 210 empresas se han certificado mediante el Sistema B. Un desafío complejo que además exige renovar esta certificación cada tres años, con metas cada vez más exigentes sobre sustentabilidad.
Al menos 6.500 empresas se han certificado a nivel global, mil de ellas solo en Latinoamérica, donde se espera seguir creciendo y generando conciencia sobre el alcance que puede tener cambiar el paradigma a una mirada integral, donde la comunidad y la propia organización siempre tienen mucho que ganar.