Argentina apuesta por la madera plástica

En Argentina, buscan minimizar la contaminación por plásticos a partir de un gran trabajo de recolección que transforma la basura en madera plástica. Un caso de reciclaje e innovación exitoso […]
En Argentina, buscan minimizar la contaminación por plásticos a partir de un gran trabajo de recolección que transforma la basura en madera plástica.
Un caso de reciclaje e innovación exitoso es el que ocurre al otro lado de la cordillera con la empresa fabricante de bolsas, LP SRL, quienes desde hace 40 años reciclan y hoy apuestan por un proceso virtuoso el cual transforma sus residuos y todo lo que salió mal y lo vuelven a insertar en la etapa productiva.
“El reciclado antes era mal visto, se creía que de la basura del rezago se hacía algo de mala calidad, pero ahora la mirada cambió, el reciclado es algo positivo, es el futuro, es una actividad que fortalece a la empresa, es algo buscado por los clientes, por ello salimos a decir fuertemente que reciclábamos y formábamos parte de la economía circular, algo que sin saberlo, ya lo veníamos haciendo hace muchos años”, explicó Andrés Pogost, gerente de LP.
La idea surgió frente a la necesidad de gestionar los desperdicios, ya que los residuos post consumo tenían una desventaja respecto a los industriales, son de muchos tipos de plásticos diferentes, por ejemplo, el envoltorio de los fideos tiene dos tipos de plásticos para proteger el alimento y no se puede utilizar para hacer una bolsa. Lo mismo ocurre con los potes de yoghurt, los envases de leche, los paquetes de galletas. Son residuos domiciliarios que por su heterogeneidad son difíciles de reciclar, por lo que buscaron otra solución y desarrollaron la idea de la madera plástica.
Luego de 3 años de trabajo en que compraron y adaptaron tecnología, lograron un producto de buena calidad para construir. La madera plástica se realiza con eco-botellas, donde se usan todos los plásticos post consumo, limpios, secos y compactados.
Entre las ventajas de la madera plástica destaca aprovechar el residuo para hacer un producto que evita la tala de árboles, porque este material reemplaza en muchas aplicaciones a la madera convencional, se evita la extracción de recursos no renovables, no se astilla, no se quiebra, no se ve afectado por la humedad ni bichos y tiene una vida más larga que la madera, además de evitar la generación de basura.
Las posibilidades de uso de la madera plástica son amplias, en la construcción de bancos, composteras, decks, tachos para la separación de residuos, pallets, bins. En la fruticultura se utiliza en postes para las plantaciones de viñas, en alambrados perimetrales, boyeros para señalización, en la industria del petróleo reemplaza los tacos de madera, junto con placas de reconocimiento o cartelería para las calles.
“Hoy reciclamos 65 toneladas por mes, este 2024 queremos llegar a 100, y para el 2025 esperamos llegar a reciclar 200 toneladas de plástico por mes, para eso estamos invirtiendo en maquinarias, es nuestro objetivo de mediano plazo”, explicó Pogost.
La empresa realiza eco-canjes o alianzas verdes que le permiten rescatar la mayor cantidad de plástico y reinsertarlos como un producto nuevo mediante la madera plástica, generando el cambio hacia una economía circular que permita cuidar el medio ambiente.
¡En Septiembre, únete a GreenNetwork y evitemos el desperdicio de alimentos!